Los hermanos que regentan la Quesería Bada son uno de los productores más reconocidos de la Denominación de Origen Protegida Cabrales.
El Queso Cabrales Bada se elabora artesanalmente con leche cruda de vacas que pastan en las montañas de Tielve, en el corazón de los Picos de Europa.
Francisco Bada lleva toda una vida dedicada al queso Cabrales. Son 65 años trabajando uno de los alimentos más representativos de la gastronomía del Principado de Asturias.
En Quesos Bada trabajan exclusivamente con leche de vaca aunque otros pastores también utilizan leche de cabra y oveja.
El proceso conlleva el ordeño del animal, enfriamiento del líquido, mezcla de la leche, calentamiento, cuajo, reposo de dos horas, remover la cuajada y finalmente pasar a los moldes durante 5 días. Los pasos siguientes son el salado, secado durante unas semanas y finalmente el descanso en la cueva entre cuatro y ocho meses.
Francisco Bada desvela en la conversación un detalle que suele creerse al revés. El queso Cabrales más duro lleva menos tiempo en la cueva que las piezas más cremosas.
Los elaboradores del Queso Cabrales se encuentran desde hace tiempo con dos problemas: la falta de mano de obra de gente joven por la despoblación de las zonas rurales y la protección del lobo que mata las cabezas de ganado, sin encontrar hasta el momento una solución que satisfaga a los interesados.
Al menos, por ahora, todavía existe la posibilidad de disfrutar el Queso Cabrales, una joya del Paraíso Natural.