Extraordinaria opción con Estrella Michelin que combina cocina tradicional y platos elaborados. Cada uno por su lado. En un mismo menú se despiertan todos los sentidos con unos exquisitos callos preparados como «toda la vida», una fantástica fabada -sin excesos de grasa y con faba fresca-, o un pitu de caleya (pollo salvaje) que quita el sentido. Y en la misma degustación la casa propone sublimes ideas plasmadas en la más alta cocina de vanguardia con producto de primera calidad.
Si el bolsillo lo permite, es una gozada dejarse llevar por el sumiller Daniel González para maridar la exhibición.
Restaurante imprescindible en Asturias con más de 100 años de vida que regentan Pedro y Marcos Morán, cuarta y quinta generación.
